Era mejor decir que no...

La mente descarrila, y provoca convulsiones en el alma…

No sabe mi cuerpo para donde correr… mis sentidos ciegos están.

Por qué? Una y mil veces por qué?

Si sabia que era mejor decir no, era mejor parar, era mejor correr…

Y me mentís en la cara, y lo peor es que me encanta. Y vos sabes que se, y que juego… y ninguno da marcha atrás…

Recordando

Y uno comienza a recordar que no fue tan malo el ayer… no tan malo como parece ser el hoy.
Y los recuerdos vagan entre la realidad y la fantasía, y uno no logra discernir cual es cual... queda la sensación de que todos fueron reales, pero la mente rotundamente dice que no.
Y cómo volver el tiempo atrás, para saber qué parte es la verdad? Y cómo desterrar la fantasía cuando parece más sólida que cualquier otro recuerdo real?
Cómo saber si esos besos que quitaron el aliento no fueron solo una farsa? Una ilusión? Una mentira despiadada? Si, despiadada, porque no hubo otros besos ni remotamente parecidos a ellos que lograran borrar, o al menos empañar su recuerdo…
Cómo saber? Cómo volver?... Cómo no extrañar lo prohibido, lo negado, lo vivido?...
Y uno termina recordando... que al final, no tan malo fue el ayer... no tan malo como parece ser el hoy...