Gritar

Espera en un bar. No veo la hora de probar de nuevo tus labios… Labios que lentamente me van envenenando.

Alcohol en la sangre y ganas de gritar es lo que tengo en este momento. Gritar cuanto te extrañé y cuanto te extraño. Gritar cuanto he necesitado y cuanto necesito de tu presencia a mi lado. Gritar cuánto de ti me he enamorado y todo lo que cada día te amo.

Sos mi ángel, mi cable a tierra, ocupas ya mi mente, mi corazón… vos ya sos mi vida.…

El juego (II)

Necesito volver a verme reflejada en tus ojos.

Necesito volver a sentir que sos mío.

Necesito que me hagas tuya en cada caricia, en cada sonrisa, en cada suspiro…

Te necesito a mi lado nuevamente, te necesito conmigo… necesito tu calor, pero hoy solo me regalas frío.

Piensas que ese frío me lastima, me hiere en lo más profundo, y sabes que tienes razón; pero a ti ese frío te envenena más, te enferma, te mata el corazón.

Sobreviviente de tu amor yo soy, y tu eres ya solo despojos. Creíste que sería al revés, pero de tu muro solo quedan escombros.

A veces el juego se da vuelta y los que eran ganadores se convierten rápidamente en los perdedores. La vida se nos ríe en la cara, poniendo y sacándole reglas a éste juego como se le da la gana…

Partida

Te vas, indiferente, y te llevas, sin darte cuenta, mi vida.

Todo lo que alguna vez dijiste sentir, se esfumo en dos segundos con la brisa del día.

Todas las palabras que tu boca pronunció, se deshicieron en el aire de una noche calurosa.

Te llevaste todo lo que yo tenía, todo lo que vos valías, todo lo que sentías y decías...

Te llevaste todo, olvidándote solamente de tu recuerdo, de la sombra de tus besos, del eco de tu voz... del fantasma de tu cuerpo...

Llamándote con mi mente...

No se si me escucharás, pero estoy llamándote con mi mente...
Mientras miro la luna (nuestra luna) te siento más cerca a pesar de la distancia.
Mientras miro la luna (nuestra luna) recuerdo cada beso dado por tu boca.
Mientras miro la luna (nuestra luna) la hago cada vez más mia, cada vez más tuya... cada vez más dueña de mis sueños, pensamientos y deseos... dueña la hago a ella, para que en la noche los traslade a todos ellos a tu cuerpo...
No se si me escucharás, pero estoy llamándote con mi mente, hablando con tu recuerdo, bebiendo imaginariamente el rocío que poseen tus labios... Te estoy contando cuanto te extraño, cuanto te necesito a mi lado... te estoy gritando cuanto te amo...

In-Existencia

Pienso que la forma en que vivimos la vida (me incluyo) es, en cierto sentido, absurda; ya que estamos continuamente, aunque sea inconscientemente, pensando en un Pasado, Futuro o Presente, siendo que, en realidad (si es que alguien puede saber lo que es la “Realidad” verdaderamente) ninguno de éstos existe.


El Presente, cuando uno quiere “medirlo”, o cuando uno quiere decir “ahora es presente” no existe; ya que cuando decimos o pensamos que es “ahora”, ya forma parte del Pasado.


Ahora bien, si el Presente, por decirlo de alguna manera, es imposible de ser medido, el Pasado y el Futuro, en su forma más pura, tampoco existen.


El Pasado es el Tiempo Presente que ya pasó, y el Futuro es el Tiempo que en algún momento va a ser Presente.


Pero si el Presente es inexistente, no existe un “Tiempo que ya pasó” ni un “Tiempo que en algún momento va a pasar”; por lo tanto, ni el Pasado, ni el Futuro existen.Creo que, visto de esta forma, es absurdo vivir pensando en un Tiempo que no pasó, o en un Tiempo que no va a pasar, o en un Tiempo que no está pasando...


Hablo de TIEMPO... de años, días, horas, minutos, segundos... Todo es parte de la manía que poseemos los seres humanos de medir, recortar, encasillar todo, para sentirnos un poco más seguros... para intentar controlarlo todo...


El Tiempo (en la forma en que todos lo definimos) no existe, y esto hace que sea absurda la forma en que vivimos, pensando en algo que no existe. Y si la forma misma en que se vive la vida es absurda, esto puede hacer absurda a la vida misma...


Creo que la mejor respuesta a todo esto es:

“Quizá la vida sea no solo insignificante, sino absurda”

El tiempo que nunca existió se derrite, dejando solo confusiones y temores en los ojos de la gente...

Caminante sin nombre...

Sos todo, pero a la vez parte de la nada.
Sos mío y yo tuya, pero a la vez somos solo de nosotros mismos; no tenes dueña, ni yo quien me posea.
Caminante sin nombre, tu rumbo se cruzó con el mío por segunda vez, y por segunda vez somos parte del otro sin serlo, sin decirlo, sin nombrarlo...
Caminante sin nombre, nuestros destinos otra vez se chocaron y ese choque provoco una tempestad de sentimientos.
Caminante sin nombre, sos mío y yo tuya, ambos lo sabemos, todos ya lo saben, aunque nunca posea nombre nuestro camino...


Una vez más dejo mis alas por ti, caminante sin nombre... caminante sin dueña...